Es como una nube en el cielo, cuando la nube ya no esta, no significa que haya muerto, ella continúa en otras formas, en lluvia, nieve o hielo, así que uno puede reconocerla en sus nuevas formas. Si amas con toda tu vida a una nube hermosa y ya no esta más, no deberías estar triste, tu amad@ nube pudo haberse convertido en lluvia, llamándote; ¡cariño!, ¡cariño!, ¿no me ves en mi nueva forma? y entonces no serás golpead@ por la pena y la desesperación, tu ser amado continúa siempre, y la meditación te ayuda a reconocer su presencia constante en nuevas formas.
Nuestra naturaleza es sin nacimiento y sin muerte, la naturaleza de la nube también. Una nube no puede morir nunca, una nube puede volverse nieve, granizo, lluvia... para una nube pasar de 'ser' a 'no ser' y eso es verdadero para tu ser amado. Ella no ha muerto, ella continúa en muchas formas nuevas y uno puede mirarla profundamente y reconocerla en uno y alrededor de uno.
AUTORA: Loly González Marrero
Sólo se transforma.... Muy bueno Loly González. Un saludo
ResponderEliminarGracias Ana Lia
ResponderEliminarLa renovación del se terreno en un ser espiritual! Precioso Loly! Un abrazo fraterno!!
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